Entretenimiento interactivo de Sony ha publicado un comunicado en el que afirma que Microsoft fue quien solicitó redactar la información en un documento a la Autoridad de Mercados y Competencia (CMA) del Reino Unido. Esa información se refiere a los detalles de la oferta de Microsoft para lanzar juegos de Call of Duty en PlayStation como un medio para aplacar a Sony por la fusión propuesta entre Microsoft y Activision. Si bien la oferta exacta ha sido eliminada, Sony cree que su oferta «perjudicará irreparablemente a la competencia».
La lucha legal entre Microsoft y Sony no parece que vaya a terminar pronto
Nueva declaración de Sony, dice que la oferta actual de Call of Duty de Microsoft «perjudicará irreparablemente a la competencia» y dice que fue Microsoft quien solicitó la redacción de la presentación pública del acuerdo que ofreció a PlayStation pic.twitter.com/5rztGqTvku
— Esteban Totilo (@stephentotilo) 10 de marzo de 2023
Para algún contexto, este documento es el mismo en el que Sony dice que Microsoft y Activision podrían hacer que Call of Duty tenga errores deliberadamente en PS5 y PS4 para convencer a los jugadores de cambiar a las plataformas Xbox. Así que puedes tomar eso como quieras. Dicho esto, Sony aparentemente está jugando duro en una nueva declaración, como se informó. vía tuit por Stephen Totilo en Axios:
Las versiones redactadas de las observaciones presentadas por SIE y Microsoft sobre el aviso de remedios de la CMA se hicieron públicas esta semana. La información sobre los términos de una oferta realizada por Microsoft para proporcionar futuros lanzamientos de Call of Duty en PlayStation se eliminó a pedido de Microsoft. Creemos que su oferta actual dañará irremediablemente la competencia y la innovación en la industria.
Esta es solo la última de lo que parece ser una batalla legal prolongada entre Microsoft y Sony por la adquisición de Activision. Xbox ha argumentado que el acuerdo obligaría a Sony a mejorar PlayStation Plus, mientras que Activision acusa a Sony de solo querer sabotear el acuerdo por completo. Dicho esto, la fusión sigue enfrentándose a un duro desafío en el Reino Unido.